Punto de encuentro
Prontuario de política para ciudadanos a punto de renunciar
Joaquín Goyache Goñi, Jose Villazón
Punto de encuentro ofrece una visión resumida del marco político español y de los desafíos a los que se enfrenta la sociedad española del siglo XXI. Con un lenguaje sencillo, esta obra explica las coordenadas del sistema político actual, detalla el valor de lo ya construido y los posibles consensos de futuro.
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Este tratado es un prontuario de recuperación y de regeneración de la ilusión de la ciudadanía normal, que ve cómo las estructuras básicas de su país se alejan, cada vez más, de sus inquietudes y, sobre todo, de sus necesidades, golpeada por las sucesivas y continuas crisis (socioeconómicas, energéticas, climáticas, sanitarias, etc.), encajando tantos golpes como puede soportar su maltrecha moral y que camina sonada ante un futuro incierto, lleno de radicalismos, que se dibuja con unos lápices que no maneja en absoluto.
Este libro es un botiquín de alivio rápido para una herida todavía superficial que amenaza con hacerse más profunda hasta dañar órganos vitales.
Les animo a leer, a informarse de forma veraz, a pensar, a participar y a ilusionarse. Este es el punto de encuentro ciudadano deseado por el autor y por mí.
(Del Prólogo de Joaquín Goyache Goñi, Excmo. Rector de la Universidad Complutense de Madrid)
- Prólogo de
- Joaquín Goyache Goñi
- Escritor
- Jose Villazón
- Colección
- Ideas
- Número en la colección
- 5
- Materia
- Ciencias Políticas
- Idioma
- Castellano
- EAN
- 9788418164170
- ISBN
- 978-84-18164-17-0
- Edición
- 1
- Fecha publicación
- 29-08-2022
Sobre Joaquín Goyache Goñi (Prólogo de)
Sobre Jose Villazón (Escritor)
Reseñas
Permítanme presentarle al autor. José Villazón es licenciado en farmacia por la Universidad de Santiago de Compostela —ni periodista, ni politólogo— y regenta una en su lugar de nacimiento, Villaviciosa de Asturias (1970), a la que acudo ocasionalmente en mis vacaciones de verano. No me une con él relación de amistad, pero, a partir de ahora, y por mi parte, sí una singular admiración por su categoría cultural y ciudadana. Entré en su farmacia, me reconoció, me hizo un comentario amable —a veces está de acuerdo con lo que escribo y digo y otras no— y en la siguiente ocasión —hace unos días— me regaló su libro —es su primera obra— con una amable dedicatoria.